viernes, 21 de marzo de 2008

¿Quién es el próximo? Se agudiza la crisis bancaria imperial


La crisis "subprime" y las proyecciones recesivas en la economía estadounidense siguen impactando cada vez más en la economía y en el sistema bancario de EEUU y de Europa cuyas principales instituciones financieras ya fueron (o están siendo) afectadas por la debacle crediticia que arrastra a la primera potencia imperial.
Los grandes bancos de inversión (incluidos los europeos) han tenido que hacer enormes provisiones para tapar los "agujeros" de las "subprime", depreciar sus activos y reducir drásticamente sus costos, lo que ha supuesto la caída de presidentes y consejeros delegados de esas entidades, acompañados por decenas de miles de trabajadores despedidos.
La crisis bancaria (como efecto de las "subprime") proyectada de EEUU a Europa tiene como protagonistas centrales a los líderes hegemónicos de la especulación financiera a escala global: Bear Stearns, Lehman Brothers, Merrill Lynch, Goldman Sachs, Citigroup y J.P. Morgan, entre otros.
En un ciclo de reproducción perversa del "dinero por el dinero mismo" (transferencias informatizadas a escala global) la dinámica de estos grupos súperconcentrados revela el predominio del capital especulativo (dinero sin fronteras) sobre el productivo, como dato más sobresaliente y distintivo de la llamada "globalización" del sistema capitalista en decadencia.
Como se sabe, y lo destacan una multitud de expertos, EEUU, la locomotora del sistema capitalista "globalizado", ha sustituido a la "economía real" por la "economía bancaria", o sea, ha sustituido a la "economía de los recursos genuinos" (respaldados por la producción) por la "economía de los papeles" (acciones de deuda sin respaldo) circulando por los mercados financieros globales.
“Mientras que los bancos de ahorro y comercio han sido los mayores prestamistas para los compradores de casas, desde 2006 Wall Street tiene el comando en la participación del mercado de financiamiento de hipotecas (un 60 por ciento), según datos de la Reserva Federal”, señala The New York Times. “Los bancos de inversión (Lehman Brothers, Bear Stearns, Merrill Lynch, Morgan Stanley y la Unión de Bancos Suizos) venden las hipotecas de los emisores del crédito y las ponen en un fondo común que promedia el riesgo. Luego dividen el fondo de hipotecas en tramos basados según la calidad, para revenderlas”, apunta el Times.
La enorme rentabilidad de este "negocio" atrajo a todos los bancos de Wall Street, que se lanzaron a comprar compañías de crédito hipotecario y, en especial, a otorgar líneas de crédito a empresas vinculadas con los préstamos hipotecarios de baja calificación, porque rinden un mayor interés.
El año pasado los expertos advirtieron que si el el proceso seguía avanzando, el precio de las propiedades hipotecadas caerían por debajo del valor de los créditos hipotecarios, lo que podría precipitar un hundimiento financiero generalizado con quiebras bancarias, tal como está sucediendo en el presente
En la crisis bancaria que se proyecta desde USA y se expande por el planeta, se entrelazan dos factores: el alto costo del crédito y el retroceso del mercado inmobiliario, este último afectado por la sobreoferta de propiedades y por la incapacidad de numerosos deudores de continuar pagando las cuotas.
Mientras los precios de las viviendas en los EEUU y otros países continúan descendiendo, los bancos norteamericanos y europeos anunciaron pérdidas millonarias relacionadas con hipotecas "subprime